Como ya conocen, la Casa de Acogida « María Luisa de Jesús » es una obra de CEPROVI -l Centro de Protección a Víctimas de Violencia » - Asociación Civil que se creó para dar respuesta a la problemática relacionada con la violencia familiar y sexual que sufren numerosas niñas, adolescentes y mujeres. En varias oportunidades hemos compartido nuestra labor como Hijas de la Sabiduría, desde los años en que se trabajó en prevención con niñas/os y adolescentes de la zona hasta ampliarlo con el albergue y la atención interdisciplinaria a una mayor población proveniente de diversas localidades de nuestra Provincia. Inicialmente fue posible iniciar la acogida en una casita alquilada y el siguiente año nos trasladamos a la infraestructura recién construida, gracias al proyecto financiado con el Fondo Italo Peruano.
La hermana Giovanna, continúa trabajando como asesora de nuestro equipo, siendo miembro fundador de nuestra Asociación.
Las Hermanas Esther y Katty, recientemente integradas a nuestra comunidad, están conociendo un poco más la obra, y han visitado la Casa de Acogida, impulsando la solidaridad de otras personas en favor de la Casa. Por ejemplo, el domingo último (19 de julio) visitó un grupo de alumnas y alumnos del tercer año de secundaria del colegio donde Katty trabaja como profesora, y compartió no sólo algunos víveres y artículos de utilidad sino también momentos de amistad a través del deporte y de baile.
Jesús Sabiduría ha venido a los cruces de nuestros caminos para sanar las heridas, para dar vida en abundancia, de manera preferencial a los más vulnerables. Fieles a la misión de Jesús Sabiduría, Montfort y María Luisa abrieron las puertas de su corazón a la humanidad herida de su tiempo, y hoy, ellos mismos nos impulsan e interpelan constantemente a seguir en este camino emprendido por ellos: abrir las puertas a aquellas que sufren y gritan a causa del sistema patriarcal y de iniquidad de género por lo cual la mujer (niña, adolescente, madre) sigue siendo pisoteada en su dignidad misma, por ser mujer. Como Hijas de la Sabiduría optamos por seguir respondiendo, con todo nuestro ser, donde la vida clama revelando su gran Amor y su deseo de que todas y todos seamos felices.
María, Nuestra Señora de la Sabiduría, que fue niña, adolescente y madre, quiere que todas las mujeres se mantengan de pie, sin humillaciones o miedos, fuertes y dignas, por ser, saberse y sentirse hijas de Dios, y por lo tanto luchando para ser tratadas con esta dignidad.
Hna. Rosa Amelia Canicoba
Comentarios
Publicar un comentario