Más allá del COVID-19 somos Centinelas de la Esperanza

La cuarentena nos invitó al aislamiento, a vivir en zozobra y solidaridad con nuestros hermanos, así como viene acompañado de la muerte y el temor, ha despertado mucha creatividad y solidaridad.

 La creatividad que CONVID-19 ha despertado, nos ha permitido a sembrar nuestra espiritualidad en muchos corazones. Cada Hermana de la Comunidad formó un grupo de personas y amigos que conocemos, para compartir las guías de oración del triduo entre una fiesta a otra.

Celebrar la fiesta de nuestros fundadores ha sido muy sentida, hemos llegado a más personas de manera virtual, en la capilla de San Luis, la parroquia y nuestros centros de trabajo. 

Las personas nuevas quedaron agradecidas y motivadas a continuar conociendo la vida de nuestros fundadores. Se ha recibido de los jóvenes de la parroquia cantos virtuales en homenaje a Montfort y María Luisa. 

Esta iniciativa nos lleva a la organización de un grupo de Amig@s de la Sabiduría que serán acompañados virtualmente. La verdad no sabíamos cómo proceder o que hacer para no quedarnos guardando la riqueza y la belleza de nuestra espiritualidad.  

Inspiradas en las palabras de Montfort que resonaba en el corazón “Si no arriesgas nada por Dios, nada grande harás por El¨ y la actitud de búsqueda amorosa y persistente de la madre María Luisa de Jesús para encontrar un lugar donde fundar la cuna de las Hijas de la Sabiduría nos lanzó a esta aventura virtual. 

Del mismo modo se han ido abriendo otras salas virtuales: catequistas, un grupo mixto donde participan jóvenes y adultos. En cada grupo se oró el triduo de los fundadores, teniendo presente en la oración a familiares enfermos (de cáncer, de COVID-19, por la aceptación del aislamiento social…etc.).   también se está rezando la novena a la Madre María de Jesús, al final de novena se comparte la vida de la madre María Luisa confrontándolo con la realidad.

Este espacio nos ayuda a manifestar nuestra confianza, nos fortalece aclarando dudas, afianzando decisiones, expresando nuestro desacuerdo sobre la aprobación del aborto…etc. de esta manera somos centinelas de fe y esperanza para el pueblo que sufre.

Pareciera que el COVID-19 quitó la eficacia de la productividad a la mayoría de los religiosos (esta concepción depende de cada persona), para mí el COVID-19 ha sistematizado de manera diferente mi vida, ya que las puertas de

la evangelización, la caridad y el servicio están abiertas virtualmente.

Por mi parte en las mañanas monitorio la escuela virtual de ciegos y trabajo en la gestión de documentos. Por las tardes acompaño virtualmente a personas que necesitan apoyo espiritual y emocional. En las noches me acerco virtualmente a los jóvenes, con el fin de crear espacios para la Animación Vocacional.

Por último, agradezco a Dios por tener más tiempo para alimentarme y crecer espiritualmente.

 

Hna. Victoria Armandina Retuerto Chauca

Huánuco

Comentarios

Entradas más populares de este blog

¿Quiénes Somos?

La cabaña. “Relación de amor”

Las Hijas de la Sabiduría