Con el corazón feliz

Feliz de estar, y de ser una integrante del grupo de los Amigos de la Sabiduría. Puedo aprender en cada encuentro la riqueza de vida que Dios le regaló a cada uno, con dones diferentes, semejantes, pero no iguales.

Por eso nos creó hombre y mujer, lo que nos hace distintos, nos hace individuos.

Pienso que Jesús nos eligió en este grupo para que podamos crecer juntos, conociendo y viviendo su palabra, para que después podamos compartir con el hermano más pobre y necesitado, brindándole una mano cálida para que se levante, prestándole el oído para escucharlo y darle una palabra de ánimo, de aliento, alegría, amor, que sepa que nunca está sólo porque Jesús Sabiduría está con él y nunca lo abandona.

Señor te doy gracias por todas las personas que pusiste en mi camino; en especial a la hermana Réjane cuando vino a visitarme hace un año y me invitó a formar parte de este grupo. 

Gracias también por la vida de Montfort y María Luisa, que son nuestros modelos de vida, que nos ayudan con su testimonio a seguir a Jesús.

Le confío a María la perseverancia de nuestro grupo, que Ella nos muestre cada día, cómo dar a conocer a su Hijo.

Con cariño.



María Eva Billordo
Amigos de la Sabiduría
Argentina – Buenos Aires

Comentarios

Entradas más populares de este blog

¿Quiénes Somos?

La cabaña. “Relación de amor”

Las Hijas de la Sabiduría