Los institutos de vida consagrada, y las sociedades de vida apostólica, que realizan opciones a partir de los pequeños signos interpretado en la fe y en la profecía, saben intuir el más allá que se convierten en lugares de vida. Allí brilla la luz, y se escucha la invitación que llama a otros a seguir a Cristo. (Escrutad) Con estas palabras del Papa Francisco, quiero comenzar mi compartir de lo que me ha significado este año, la misión como Hija de la Sabiduría. Me detendré en dos palabras del texto anterior, “los pequeños signos interpretados en la fe y en la profecía….”. El pequeño signo del jugar, escuchar, esperar, en lo cotidiano del día a día, en el proyecto de niños “Para que todos tengan vida” (Jn. 10, 10), que se ha convertido para mí, a lo largo del año, en camino de fe, porque nadie me aseguraba, que lo aprendido de ayer, por uno de estos pequeños, fuese mañana una escalera más a subir, o simplemente el iniciar de nuevo con paciencia, y con amor. Como expli...