Oh Sabiduría, ¿qué es lo que te lleva, a seguir invitándonos al amor? ¿Qué es lo que te motiva, para decirnos que no hay más felicidad que “Amar sin fronteras”? Nos has mandado el gran mandamiento del amor de amarnos como el Padre te amó. De no olvidarnos que seamos expresión del amor las unas con las otras. Que la gran audacia de corregirnos, animarnos, arriesgarnos y apoyarnos, es expresión del amor. La gran recomendación de nuestras hermanas mayores encontrar la felicidad y vivirla, la fidelidad y el riesgo, es la afirmación de quienes han caminado este trecho. Otras nos animan siendo esperanza para nuevos horizontes, nuevas maderas para construir el puente. ¡Oh qué fuerza se encuentra en tan bellas expresiones de amor! Amen y amemos sin fronteras, qué locura para nuestra sociedad, pero que locura sabia, para quienes conocimos el amor y al Amor. Locura o no locura, la invitación ya está hecha. ¡Amen sin fronteras!, es el gran mandato que nos das. Corra...