Cantemos con Montfort

Este es un día de gozo y fiesta, pues el Dios mismo del alto cielo quiso a nosotros asemejarse, como mortal. Vamos a verlo y a adorarlo y a bendecirlo por tanto amor: hagamos corte de honor, a Jesús, Dios del amor, hagamos corte de honor, que es nuestro Dios y Señor. Santa María, Madre divina, ¡cómo admiramos tu inmensa suerte! Tú que pudiste a tu Salvador, brindar la vida; con tu pureza y regia humildad has cautivado al mismo Dios. ¡Oh Corazón tan amado!, que se entregó por amor, y por amor se ha encarnado. ¡Publiquemos tan gran don! DIOS SÓLO. Cántico 57